La República Dominicana ha sido incluída por el gobierno del presidente Barack Obama como plataforma del tráfico de drogas.
Otras once naciones latinoamericanas, incluyendo Haití, son consideradas en iguales condiciones.
De acuerdo con la Ley de Autorización de Relaciones Exteriores, el presidente notifica al Congreso cada año sobre los países que considera que son importantes productores de droga o de tránsito de estupefacientes en el mundo.
En esta ocasión identificó a Afganistán, Bahamas, Bolivia, Brasil, Birmania, Colombia, la República Dominicana, Ecuador, Guatemala, Haití, India, Jamaica, Laos, México, Nigeria, Pakistán, Panamá, Paraguay, Perú y Venezuela.
El gobierno norteamericano delinea un plan de asistencia para el combate del narcotráfico en la región y resalta que en el caso específico de la frontera domínico-haitiana, se enfatizarán medidas de controles, par lo que se apoyará la prolongación y ampliación de las fuerzas de seguridad haitiana organizadas por las Naciones Unidas.
Según un comunicado del Departamento de Estado, Bolivia, Venezuela y Birmania no han declarado "de manera demostrable" su respeto por los acuerdos internacionales contra las drogas ni han tomado medidas contra el flagelo.
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