jueves, 3 de septiembre de 2009
Hombres armadas de fusiles y metralletas intentan asaltar anoche casa oficial DNCD
Los desconocidos tenían un AK-47, una USIS, una escopeta calibre 12 y pistolas o milímetros
Varios hombres armados de fusiles y metralletas Uzis intentaron anoche asaltar la casa de un oficial de la Marina de Guerra, adscrito a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), después de que un equipo antinarcóticos desmantelara un centro de expendio de cocaína, en el sector 27 de Febrero lugar donde fueron ocupadas cientos de porciones de ese tóxico y detenidas dos mujeres.
Los reacción de los individuos, que son buscados por los organismos de seguridad de inteligencia, se produjo a raíz de que la DNCD y un fiscal ocuparan, hace poco RD$1,901,700 en efectivo, una pistola y un carro BMW en la casa de un reconocido capo de la zona, a quien las autoridades describen como “uno de los principales narcotraficantes que operan por allí, pero su reinado está a punto de terminar”.
“Eso no nos va a intimidar, porque vamos a actuar contra quien sea. Esto es a penas el inicio de la lucha que estamos librando, caiga quien caiga. Nos tendrán de frente en el día, en la noche y en la madrugada”, advirtió esta mañana el general Rolando E. Rosado Mateo, presidente de la DNCD.
Las mujeres fueron identificadas como Yubelkis Pimentel Rodríguez y Eliza Paulino, sorprendidas en un centro de venta de drogas ubicado en la calle Luis Reyes Acosta, antigua 15, en el sector 27 de Febrero, donde vendían estupefacientes bajo las ordenes de un sujeto identificado como Carlos Paulino, alias ‘Carlos Saca Leche’.
Ese individuo, de acuerdo al jefe antidrogas, es un de los mayores intermediarios de la droga en el citado barrio, así como en Gualey, Villa María y Espaillat, tras indicar que este actúa bajo las ordenes del nombrado Jesús Ramírez Naut, a quien recientemente les fueron encontrados la alta suma de dinero y el lujoso vehículo citados antes.
Las dos mujeres son concubina, la primera, y hermana, la segunda, del nombrado Carlos Paulino, definido por el jefe antinarcóticos como la persona que habría acudido a la vivienda del oficial de la Marina cuya familia no fue liquidada por la presencia de varios vecinos en su vivienda y por la llegada a tiempo de un equipo policial.
“Tenemos el dato de que 6 hombres se presentaron a la casa del oficial, cuyo nombre no revelamos por razones obvias, con la intención de tomar alguna represalia. Tres tenían un AK-47, una metralleta Uzis y una escopeta 12, mientras el resto estaba armado de pistolas 9 milímetros, según un testigo con conocimiento de armas”, dijo Rosado Mateo.
Los sujetos llegaron al lugar a las 10:15 de la noche de este miércoles en una camioneta Nissan Frontier color blanco y un carro Toyota Corolla color gris. El Departamento de Investigaciones de la DNCD, el Servicio Secreto de la Policía y la Dirección de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (J-2) tienen el asunto a su cargo”, agregó.
Garantizó que “la respuesta será contundente, porque no vamos a aceptar bravuconadas de delincuentes de esa calaña”, al tiempo de afirmar que la DNCD “actuará con energía, dentro del marco de la legalidad, pero que sepan los delincuentes que agredir a uno de nuestros miembros será asumido como una agresión a todo nuestro personal”.
Fue necesario, ante la amenaza abierta al oficial y su familia, montar una vigilancia permanente en el lugar, pero “en lo adelante la guerra es frontal, sin importar las consecuencias, porque ellos o nosotros, y creo que nosotros, porque no es verdad que el crimen se va a imponer su criterio en una sociedad organizada como la nuestra”.
En esa operación, que estuvo a punto de provocar un baño de sangre, participó un fiscal adjunto del Distrito Nacional, cuyo nombre tampoco fue revelado por el portavoz de la DNCD, el periodista Roberto Lebrón, quien ofreció los datos a nombre del general Rosado Mateo, jefe antinarcóticos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario