Simultáneamente, el jefe de la institución del orden, designó una comisión de alto nivel para investigar si en realidad policías asignados a la dotación de Bonao cobraban “peaje” al presunto narcotraficante Nelson Sánchez (El Gordo), apresado la semana pasada durante un allanamiento.
En sustitución del destituido coronel Antonio Cepeda Ureña fue designado el también coronel Miguel Andrés Abreu Suriel, a quien se le instruyó adoptar las medidas que sean necesarias para combatir el crimen en la zona.
El mayor general Guzmán Fermín advirtió que no le temblará el pulso para expulsar de la institución a cualquier agente policial que se demuestre incurrió en acciones bochornosas y contrarias a las buenas costumbres.
El jefe de la Policía se trasladó a Bonao en compañía del vocero de la institución, coronel Nelson Rosario, para ejecutar los nuevos cambios.
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